En la sabana, no teníamos televisión, ni anuncios que promovían la fragilidad, y la evitación a la incomodidad, tampoco radio, ni consultas expertas en la «sensiprevención».
Nunca hemos vivido con tantas comodidades a nuestro alcance.
¿Tengo calor? Enciendo el aire acondicionado
¿Tengo frío? Pongo la calefacción
¿Tengo ganas de gastar? Amazon, mañana me llega.
¿Estoy triste? Espera que subo una foto a las redes.
¿Me duele un poco la cabeza? Me tomo un ibuprofeno, por si acaso. Que no vaya a más.
Si si…
¿Sensiprevención? ¿Qué es?
Una nueva rama. Consiste en alertar al individuo/usuario de todos los peligros que conllevan los cambios y vivir.
La intención es buena.
¿El resultado?
Organismos más sensibles a los cambios inesperados. Menos adaptativos. Umbrales de tolerancia más bajos.
Soy intolerante a:
…..
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–Cualquier cambio me molesta. No lo soporto–.
Desde el punto de vista biológico. El organismo se nutre de los cambios, variabilidad de sensaciones, experiencias, y aprendizajes.
Así que,
Tú mismo o misma, quizá es hora de exponerte un poco a la incomodidad de los cambios, y exploración. Promover la habituación (capacidad de adaptarse) y ser un poco más libre.
Un saludo.
