La migraña es un síndrome, descrito por los usuarios como una tormenta cerebral, que desencadena síntomas desagradables. En este artículo te hablo de los mitos que la cultura apoya sobre los casos de migraña, y también te relato el testimonio de tres pacientes que recibieron un abordaje neuropedagógico.
Muchos usuarios tienen información para disminuir los efectos y la recurrencia de las migrañas, pero no les ha funcionado. El problema es que la información que manejan está anticuada porque no se basa en lo biológico, y se sigue tratando como un síndrome asociado a un daño o enfermedad misteriosa.
Causas populares aceptadas
Se dice de la migraña que es genética, para toda la vida, y sin cura. No se ha encontrado tal «gen sospechoso». También se teoriza, que está asociada a una hiper-excitabilidad de las neuronas y sensibilidad en las terminaciones nerviosas del nervio trigémino. En plena crisis puede tener una mayor sensibilidad, pero eso no confirma que las neuronas sensoriales cometan excesos de actividad. Otros creen que es causada por problemas vasculares en el cráneo, aunque esta razón cada vez se asocia menos. Ahora le toca el turno al aumento de la CGRP en las meninges y al desequilibrio del sistema nervioso autónomo.
Hay que entender que cualquier síntoma sin pruebas médicas objetivas de enfermedad, entrada de virus, lesión, surge de una respuesta asociada a una evaluación de amenaza por parte del organismo. Si en medio de una crisis de migraña, te hicieran una incisión en el cráneo, no hallarían nada.
De hecho, a las personas que acuden al neurólogo, (cosa que recomiendo de antemano) no les encuentran nada patológico. El diagnóstico se basa en la historia clínica y la aparición de los síntomas. Por lo tanto las medidas a tomar, no pueden ser como si se tratara de una enfermedad, como puede ser una esclerosis múltiple, un parkinson, etc.
Otro aspecto fundamental es que el organismo/cerebro cambia su forma de operar, en base a lo que ocurre o lo que imagina. Los hallazgos de cierto tipo de sustancias químicas, no son más que respuestas de un estado evaluativo. Lo mismo con los cambios en la actividad del sistema nervioso autónomo.
Si me llega una noticia que activa la alerta interior y mi organismo interpreta que tengo que hacer algo inmediatamente, en mi cerebro y cuerpo se van a liberar sustancias para ayudarme a emprender y codificar la acción. Y debido a esa respuesta, a parte de experimentar diversos síntomas, mi sistema nervioso autónomo va a verse afectado. Si padezco 4 migrañas semanales, es bastante probable que mi sistema lo refleje. Correlación no es igual a causalidad.
Usted, a menos que esté acostumbrado a algo, cuando tenga que hacer una tarea que no conoce, que le genere incertidumbre, o no quiera hacerla, es probable que se sienta un poco incómodo y exaltado, no antes de imaginar cómo seria.
Medidas comunes para combatir la migraña
Se recomienda evitar situaciones, alimentos y hábitos que puedan detonar la migraña.
Que debes tomar medicación, asilarte a un lugar tranquilo, bajar las persianas, evitar ruidos y luces, y esperar a que pase la migraña. «Estoy en medio de la tormenta, y me quedo ahí, quieto». Sé que se suele recomendar esto, justamente, pero es que estoy hablando de una tormenta imaginada por el cerebro, no de la que objetivamente otros pueden ver.
A continuación te relato algunos casos de migraña, que mejoraron la recurrencia e intensidad de los síntomas, no quedándose a que la tormenta pase.
Algunos casos de migraña
E.C, L.R, L. P son las iniciales de tres usuarios del género femenino que se visitaron por migrañas. Hay más.
E.C mujer de 60 años. La más reciente. Tomaba un nolotil diario para prevenirlas. Muchos días, al acabar el día, aparecía la migraña. A veces, se despertaba ya con ella. En tres semanas, de tratamiento, pasó de siete nolotiles a la semana, a uno. Y reconocido por ella, uno por precaución y anticipación. Obviamente, el número de migrañas disminuyó drásticamente. Llevo semanas que no la veo. Como ella dice: —Lo controlo bien.
L.R, se visitó por otro motivo. Una contractura según ella, y otros profesionales. Una contractura de más de un año de evolución. Y migraña por semana. Lo primero fue «la contractura», eso fue rápido de solucionar. Lo segundo, desaprender la migraña. Después de 4 visitas, estuvo tres meses sin ninguna. Luego volvieron, pero desaparecieron rápido otra vez. A día de hoy, no la atiendo por migrañas. Ella sabe que tiene que hacer.
L.P, Padecía migrañas mensualmente, su hermano y padre también. ¡Ui el gen! Pues no. La última vez que se visitó, por otro motivo. Me dijo que de lo más orgullosa estaba era que hacía un año y medio que no recordaba haberse tomado ni cinco ibuprofenos. Antes podían ser dos, tres por mes.
Conclusión
La migraña es una condición compleja y multifacética. La información tradicional puede no ser suficiente para todos. Es importante considerar enfoques basados en la neurociencia del dolor y estar abiertos a desaprender creencias antiguas para encontrar alivio. Si necesitas más información o quieres discutir más sobre este tema, no dudes en contactarme.
Aquí te dejo un enlace dónde te hablo un poquito más del tema.
