El dolor en los omóplatos y el cuello es una molestia común que afecta a muchas personas en algún momento de sus vidas. Esta afección puede variar desde una leve incomodidad hasta un dolor agudo e incapacitante. Es fundamental comprender las posibles causas, síntomas y tratamientos disponibles para manejar y disminuir la recurrencia de este tipo de dolor de manera efectiva.
En muchos casos, el dolor entre los omóplatos y el cuello puede estar relacionado con un trabajo repetitivo y/o que no estamos acostumbrados a realizar, que excede el umbral de tolerancia inicial, generando estrés tisular y un exceso de tensión muscular. Sin embargo, en algunas situaciones, podría ser indicativo de problemas más serios, como alteraciones cardíacas o pulmonares, incluso herniaciones cervicales latentes. Por esta razón, es importante prestar atención a los síntomas y buscar atención médica si el dolor es severo o persistente.
En este artículo te informo de las causas comunes, y de los abordajes disponibles para el dolor de omóplatos y cuello sin causa médica que lo justifique, es decir, sin daño, ni lesión.
Las causas del dolor en los omóplatos y el cuello son variadas y pueden incluir factores como:
Estrés y tensión muscular
El estrés psicológico y físico puede provocar un aumento de tensión en los músculos del cuello y la zona interescapular en algunas personas, y que a menudo se presenta con dolor y rigidez.
Invariabilidad postural
Pasar largos períodos de tiempo sentado o de pie en la misma postura, intentando mantener la «postura correcta» puede producir tensión adicional en los músculos y las articulaciones de la región cervical y escapular.
Lesiones y traumatismos
Lesiones deportivas, accidentes de tráfico o caídas pueden dañar los músculos, ligamentos y tendones alrededor de los omóplatos y el cuello.
Problemas espinales
Condiciones latentes de herniación discal, la artritis cervical o la espondilosis cervical pueden causar dolor que se irradia a los omóplatos.
Patrones de movimiento repetitivos
La repetición de movimientos en los que tengamos que conducir los brazos por encima de la cabeza, pueden generar un estrés en la zona entre los omóplatos y la cervical
Síntomas asociados y diagnóstico
Los síntomas del dolor en los omóplatos y el cuello pueden variar dependiendo de la causa subyacente. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:
- Dolor sordo o agudo en los omóplatos y el cuello.
- Rigidez y dificultad para mover el cuello y los hombros.
- Dolor que se irradia hacia el brazo o la espalda.
- Sensación de hormigueo o entumecimiento en los brazos.
- Dolor de cabeza por un error evaluativo del organismo, que le acompaña sensación de rigidez en el cuello y la musculatura interescapular.
El diagnóstico del dolor en los omóplatos y el cuello generalmente comienza con una historia clínica detallada y un examen físico. El médico puede preguntar sobre los síntomas, la duración del dolor, cualquier lesión reciente y las actividades diarias. También pueden ser necesarias pruebas de imagen, como radiografías, resonancias magnéticas (RM) o tomografías computarizadas (TC), para identificar problemas estructurales en la columna vertebral o los tejidos blandos.
Abordajes para el dolor de omóplatos y cuello
El abordaje del dolor en los omóplatos y el cuello depende de la causa subyacente y la gravedad de los síntomas. Algunas de las opciones de tratamiento más comunes incluyen:
Fisioterapia y readaptación
Un fisioterapeuta, o profesional de la readaptación, puede diseñar un programa de ejercicios de rehabilitación en caso de lesión aguda, o readaptación con ejercicios de movilidad y control motor para mejorar la función neuromotriz, disminuir la percepción dolorosa y mejorar la postura.
Elongamientos/estiramientos musculares
Masajes Terapéuticos
Los masajes pueden ayudar a aliviar la tensión muscular y mejorar la circulación en la zona afectada, y disminuir los estados de alerta en las zonas tratadas.
Terapias Alternativas
Tratamientos como la acupuntura, la quiropráctica o la osteopatía pueden ser beneficiosos para algunas condiciones puntuales.
Cambios en el Estilo de Vida
Practicar técnicas de relajación y de conciencia corporal, pueden ayudar a mitigar la aparición de dolor espontáneo.
Educación en neurociencia del dolor
Ejercicios y prevención del dolor de omóplatos y cuello
La prevención del dolor proyectado en los omóplatos y cuello, se refiere a la disminución de la recurrencia. Para ello, implica mantener un buen control escápulo-torácico en la región interescapular (entre los omóplatos), y también cervico-dorsal. Aplicando una correcta dosificación de las cargas mecánicas (si las hubiera), una consciencia corporal funcional, conservar buenos rangos de movilidad, fuerza, resistencia y control motor. Algunos ejercicios recomendados incluyen:
Movilidad del Cuello
Inclinar la cabeza hacia adelante, hacia atrás, a los lados, y girar la cabeza a la derecha e izquierda, para flexibilizar suavemente los músculos del cuello.
Ejercicios de Rotación de Hombros
Rotar los hombros hacia adelante y hacia atrás para liberar la tensión interescapular.
Elongamientos de la parte anterior
Activación muscular
Ejercicios como el remo con bandas elásticas o pesas ligeras pueden ayudar a fortalecer los músculos de la espalda y los omóplatos. También con bandas elásticas, sujetarla con la palma de las manos hacia abajo (el suelo), separar los brazos horizontalmente de modo que la banda elástica quede pegada al torso por debajo del esternón. Y después, hacer el mismo ejercicio, pero esta vez con las palmas de las manos hacia arriba.
Ejercicios de control motor
Los ejercicios de control motor, son muy útiles para mejorar la capacidad neuromotora, y propioceptiva.
Registro postural y movilidad
La variabilidad postural, y la preservación de la movilidad activa de ambas zonas, son formas de prevención, puesto que juegan un papel importante en la mecánica de los omóplatos y el cuello. Mantener una variabilidad de posturas «no correctas como se suele decir» mientras se está sentado o de pie puede reducir significativamente el riesgo de desarrollar dolor en estas áreas. En cuestiones de organismo, la variabilidad enriquece, y el intento de mantener, empobrece.
¿Cuándo buscar asistencia médica?
Es importante buscar atención médica si el dolor en los omóplatos y el cuello es severo, persiste durante varias semanas, o está acompañado de otros síntomas preocupantes como:
- Dolor en el pecho o dificultad para respirar.
- Pérdida de fuerza en los brazos o las piernas.
- Fiebre o escalofríos.
- Pérdida de peso inexplicada.
Conclusión
El dolor en los omóplatos y el cuello es una afección común que puede afectar la calidad de vida y funcionalidad de día a día. Comprender las causas, síntomas y tratamientos disponibles es fundamental para manejar el dolor de manera efectiva. Adoptar variabilidad postural, mejorar la comunicación neuromuscular y capacidad propioceptiva y practicar técnicas de conciencia corporal puede ser interesante. En casos de dolor severo o persistente, es esencial buscar atención médica para descartar condiciones más graves y recibir el tratamiento adecuado. Con el enfoque correcto, es posible aliviar el dolor y mejorar la salud general.
Hola, Soy Marc Vives
Me dedico a mejorar el estado corporal y de bienestar de las personas que acuden a mi estudio Henko Osteopatía en Tarragona.
Utilizo la Osteopatía Integrativa y la terapia manual, junto con mi pasión por el estudio y conocimiento de la Neurociencia.
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